Camps y Pons se acercan a Iturgaiz, mientras se baraja si se puede unir al nuevo equipo. El fichaje del dirigente vasco encajaría en una operación para neutralizar el hueco dejado por San Gil.
Javier Arenas se convirtió ayer por una horas en el protagonista del día. Primero se filtraba que Mariano Rajoy le había tanteado con la Secretaría General del PP y desde el entorno de confianza del presidente andaluz se confirmaba esa información que, por cierto, circulaba ya desde hace días por Andalucía. Poco después, la misma fuente de su confianza desmentía lo que acababa de afirmar. Ante el revuelo, el propio Arenas se autodescartaba como posible secretario general por su decisión de mantener su compromiso con el trabajo en su comunidad autónoma. En declaraciones a este periódico, negó incluso que hubiera habido ningún ofrecimiento por parte de Rajoy, porque éste sabía que no quería asumir responsabilidades «incompatibles» con el PP andaluz.
Reunión de «amigos» Por otra parte, el presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, y el diputado también valenciano Esteban González Pons -uno de los ya señalados como hombres fuertes en el nuevo equipo de Rajoy- se reunieron distendidamente, con mesa y mantel delante, con el eurodiputado popular Carlos Iturgaiz. Iturgaiz es un referente en el partido identificado plenamente con la todavía presidenta del PP vasco, María San Gil.
Esa reunión a tres se produce en un delicado contexto, por la situación interna que atraviesa el partido. Y en el que Mariano Rajoy tiene que bregar, además, con el encaje del equipo con el que optará a la reelección como presidente nacional del PP.
Un posible «fichaje» de Iturgaiz para ese nuevo equipo podría ser una buena jugada estratégica: serviría para cubrir y neutralizar el hueco dejado por el portazo de María San Gil al hilo de la redacción de la ponencia política que se debatirá en el congreso de Valencia. El europarlamentario, persona del círculo del ex ministro Jaime Mayor Oreja, ha sido uno de los dirigentes vascos que ha defendido con más firmeza a María. En una reunión interna del PP regional llegó a quejarse ante sus compañeros de que a quien se ha considerado como «Juana de Arco se la intentase ahora convertir en Juana la loca», en alusión a la campaña de críticas por su decisión de hacer pública su desconfianza en la dirección nacional.
Iturgaiz, fiel a su posición, mantiene que sólo trabajará para un partido unido y al que puedan volver María San Gil o José Antonio Ortega Lara, el funcionario de prisiones secuestrado por ETA.
Camps, González Pons y el europarlamentario hablaron de la situación del PP. Los dirigentes valencianos le explicaron, por ejemplo, que Rajoy está muy tranquilo porque cuenta con los avales para presentar su candidatura, e insistieron en la idea de que no va a cambiar de principios ni de línea de actuación.
En el grupo popular europeo ha empezado también ya la recogida de firmas para Rajoy. Algunos europarlamentarios se han resistido porque prefieren esperar a ver si surge otra lista y se abre así la posibilidad de comparar proyectos.
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