En la mañana de hoy, representantes de varias asociaciones de nuestra comunidad se personaron en el Centro coordinador de información y documentación xuvenil de Santiago de Compostela y, ante los defectos detectados en la convocatoria de la “XL Asamblea do Consello da Xuventude de Galicia”, decidieron no acreditarse para participar en la misma.
A pesar de que la mesa de acreditación permaneció abierta hasta las 10:39h de la mañana, cuando según el orden del día remitido a todas las asociaciones la Asamblea debería haber sido constituida a las 10:00h en primera convocatoria y a las 10:30h en segunda convocatoria, no se alcanzó el quórum mínimo exigido de la mitad más uno de los conselleiros; y todo ello pese a que excepcionalmente no fue exigida documentación alguna para hacer efectiva dicha acreditación.
Tanto el presidente de la mesa, como la presidenta del Cxg y secretaria xeral de Xuventudes Socialistas, Loli Rodríguez Amoroso, anuncian entonces que la Asamblea queda desconvocada por falta de quórum.
A raíz de esta decisión, algunos miembros de las asociaciones sí acreditadas, comienzan a increpar a los presentes, recriminándoles una supuesta “falta de democracia”.
Es en ese momento, y aun no siendo miembro del Consello, cuando irrumpe en el local el diputado autonómico Lage Tuñas, acompañado de dos supuestos conselleiros y presiona insistentemente al presidente de la mesa para abrir un nuevo turno de acreditaciones.
Siendo las 10:54h, y en una decisión sin precedentes, se abre de nuevo la posibilidad de acreditarse y una vez acreditados (de nuevo sin mostrar documento identificativo) los dos supuestos miembros antes mencionados, se cierra definitivamente el proceso de acreditación.
Las asociaciones que de este modo habrían quedado excluidas: Novas Xeracións, Clubes Xuvenís, AUTS, EFAS, Galiza Nova, CAF y CAE entre otras, se ponen de acuerdo para dejar constancia de lo sucedido y firman un documento subrayando la invalidez legal de la Asamblea.
Dicho escrito, junto con una moción de procedimiento denunciando una serie de faltas en el proceso de convocatoria que provocan la nulidad de pleno derecho de la reunión se presentan ante la presidencia de la mesa, que obvia su lectura por lo que no son tenidos en cuenta.
En Novas Xeracións nos sentimos profundamente decepcionados porque un órgano como el Consello da Xuventude de Galicia, que debiera ser máximo representante del asociacionismo gallego, se convierta en un chiringuito familiar falto de democracia.
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